diumenge, 4 de novembre del 2012

La película de Rajoy y Mas puede acabar muy mal para todos (un article de l'Enric Sopena)


¡Cuánta indecencia política comparten CiU y PP! Todo este tinglado que ha organizado Artur Mas en torno a la independencia catalana no es más que una especie de farsa para embaucar a gentes de buena fe.

Pretende presumiblemente Mas que sirva la ofensiva secesionista, tal como están las cosas, para salvar no a Cataluña -que no necesita para nada a mesías de ningún género-, sino a Convergència i Unió.
La Rusia de Putin
Va dando tumbos Mas. El otro día se fue a Moscú, a la Rusia de Putin, un tramposo semidictador. De Rusia se desgajaron la mayoría de los países que se integraron obligatoriamente en la URSS tras la caída del muro de Berlín. ¡Menudo ejemplo para Cataluña, que hace unos cuarenta años que ha vivido con unas libertades nunca vistas ni en Cataluña ni en España!.
Palmeros convenientemente engrasados
Le ocurre a CiU que no tiene garantizada, ahora tampoco, ni mucho menos, la mayoría absoluta, aunque sus palmeros mediáticos -convenientemente engrasados- digan lo que más convenga a los intereses nacionalistas. Sin mayoría absoluta, ojo, Sr, Mas.
Razones que son obvias
El PP, por su parte, ha perdido una vez más una gran ocasión para demostrar que su eje político es la dignidad y la ética. ¿Cómo explica Rajoy que, habiendo votado catorce ayuntamientos catalanes -donde cogobiernan CiU y PP- a favor de la independencia, no dimitieran de inmediato los ediles y altos cargos populares por razones que son obvias?
Estulticia aventurera
Estos concejales del PP prefirieron continuar en sus escaños antes que marcharse a sus casas para exhibir la coherencia de sus convicciones. Esa coherencia popular ni está ni se le espera. Vendieron su dignidad y su ética a cambio de un poder no mucho mayor que un plato de lentejas. Entre los separatistas y los separadores o se frena tanta estulticia aventurera o la película protagonizada por Mas y Rajoy -que hace carantoñas a los catalanes, a buenas horas mangas verdes- puede acabar muy mal para todos.
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM