José Antonio Rodrigo es miembro de Economistas
Frente a la Crisis
HISTORIAS COTIDIANAS. 1
El martes regreso a casa tras una aburrida tarde de trabajo. Como casi todas. Los niños ya acostados y mi marido parecía contento. Se le notaba. Era de estos días en que nada más verle te das cuenta que una tenue sonrisa se le escapa de los labios. Trece años dan para mucho. El habitual beso de bienvenida y le pregunto:
- ¿Qué te pasa, Manolo? Pareces contento. Se han portado bien los niños esta tarde, ¿o qué?
- Se han portado más o menos. Como casi siempre. La niña con deberes de mates y el pequeño no hay manera de que deje la maquinita. Pero no estoy contento por eso. Estoy contento porque Ignacio González, el Presidente de la Comunidad de Madrid, ¿sabes quién te digo?
- Pues claro, ¿te crees que soy tonta? –Manolo siempre piensa que no conozco a nadie.
- Pues ha anunciado que para el año que viene nos rebaja el impuesto de la renta el 1’6 por ciento.
- Sí, yo también lo he oído, pero con eso no tenemos ni para pipas.
- ¿Cómo que ni para pipas? –Me dice Manolo mientras termina de recoger la mesa.– Lo he calculado esta tarde con la niña, se lo he puesto como problema de mates. Mira, si yo gano 30.000 euros al año y lo multiplicamos por el 1’6 por ciento nos sale una rebaja de 480 euros. Que no está nada mal, ¿no?
- ¡Pero qué iluso eres! Tú y la pobre niña. ¿Has mirado la letra pequeña? Ven que te lo voy a explicar. Lo que dice González de que te rebaja 1’6 puntos significa que quitan en cada uno de los cuatro tramos del IRPF 0’4 puntos.
- Ah!, claro, 0,4 puntos por 4 tramos son 1’6. –Manolo siempre fue bueno calculando de cabeza.– ¡Qué buen truco! Como lo decía él parecía más. Puro márquetin político.
- Y además ese 0’4 por ciento no se aplica a todo lo que ganas. Se aplica a lo que ganas menos lo que llaman el mínimo personal y familiar o algo así.
- ¿Y eso cuánto es?
- Pues en nuestro caso, pareja con dos niños, son unos 7.000 euros cada uno. –La sonrisa de su cara se iba desdibujando poco a poco.– Así que trae la calculadora y lo comprobamos.
Cinco minutos para encontrar la calculadora pero al final apareció. Estaba entre sus revistas de coches. Manolo es el desorden personificado. Aunque no sé si fue buena idea buscarla, a la vista del cabreo que se cogió después.
- Mira, dices que ganas unos 30.000 euros al año. Le quitamos los 7.000 que hemos dicho antes y te quedan 23.000. Pues 23.000 por el 0’4 por ciento son 92. Te ahorras 92 euros al año. Exactamente 4 euros de cada mil.
- ¿Pero qué dices? ¿González me rebaja 4 euros el IRPF? –Definitivamente su sonrisa se evaporó– Tantos titulares y tanto bombo para 92 euros al año. ¿Y tú cuanto te ahorras?
- Pues en mi caso, que con mi trabajo de media jornada gano 10.000 euros al año, vamos a ver. 10.000 menos 7.000 de mínimo, 3.000. 3.000 por 0’4 por ciento me salen 12 euros. Claro, como en tu caso, 4 de cada mil.
Manolo ya había pasado directamente al cabreo.
- 12 euros, ¿te ahorras 12 euros de impuestos en todo el año? ¡Es indignante! Entre lo tuyo y lo mío no pagamos ni el comedor del cole de un mes, ahora que la Comunidad de Madrid nos ha quitado la beca.
- Pues sí, esto es lo que hay –le dije.
- Y mi jefe que debe ganar 600.000 euros al año, ¿cuánto se ahorra?
- 2.372 euros.
- ¿2.372? ¡2.372! Y entre tú y yo poco más de 100. Y me decía esta tarde en su despacho que como la reforma era proporcional el ahorro era igual para todos. ¿Será posible? Ya me han dado la noche, me voy a la cama.
- No te pongas así, ¿qué esperabas? Pero a ver si el próximo día que te inventes problemas de mates para la niña los sabes resolver bien
HISTORIAS COTIDIANAS. 1
El martes regreso a casa tras una aburrida tarde de trabajo. Como casi todas. Los niños ya acostados y mi marido parecía contento. Se le notaba. Era de estos días en que nada más verle te das cuenta que una tenue sonrisa se le escapa de los labios. Trece años dan para mucho. El habitual beso de bienvenida y le pregunto:
- ¿Qué te pasa, Manolo? Pareces contento. Se han portado bien los niños esta tarde, ¿o qué?
- Se han portado más o menos. Como casi siempre. La niña con deberes de mates y el pequeño no hay manera de que deje la maquinita. Pero no estoy contento por eso. Estoy contento porque Ignacio González, el Presidente de la Comunidad de Madrid, ¿sabes quién te digo?
- Pues claro, ¿te crees que soy tonta? –Manolo siempre piensa que no conozco a nadie.
- Pues ha anunciado que para el año que viene nos rebaja el impuesto de la renta el 1’6 por ciento.
- Sí, yo también lo he oído, pero con eso no tenemos ni para pipas.
- ¿Cómo que ni para pipas? –Me dice Manolo mientras termina de recoger la mesa.– Lo he calculado esta tarde con la niña, se lo he puesto como problema de mates. Mira, si yo gano 30.000 euros al año y lo multiplicamos por el 1’6 por ciento nos sale una rebaja de 480 euros. Que no está nada mal, ¿no?
- ¡Pero qué iluso eres! Tú y la pobre niña. ¿Has mirado la letra pequeña? Ven que te lo voy a explicar. Lo que dice González de que te rebaja 1’6 puntos significa que quitan en cada uno de los cuatro tramos del IRPF 0’4 puntos.
- Ah!, claro, 0,4 puntos por 4 tramos son 1’6. –Manolo siempre fue bueno calculando de cabeza.– ¡Qué buen truco! Como lo decía él parecía más. Puro márquetin político.
- Y además ese 0’4 por ciento no se aplica a todo lo que ganas. Se aplica a lo que ganas menos lo que llaman el mínimo personal y familiar o algo así.
- ¿Y eso cuánto es?
- Pues en nuestro caso, pareja con dos niños, son unos 7.000 euros cada uno. –La sonrisa de su cara se iba desdibujando poco a poco.– Así que trae la calculadora y lo comprobamos.
Cinco minutos para encontrar la calculadora pero al final apareció. Estaba entre sus revistas de coches. Manolo es el desorden personificado. Aunque no sé si fue buena idea buscarla, a la vista del cabreo que se cogió después.
- Mira, dices que ganas unos 30.000 euros al año. Le quitamos los 7.000 que hemos dicho antes y te quedan 23.000. Pues 23.000 por el 0’4 por ciento son 92. Te ahorras 92 euros al año. Exactamente 4 euros de cada mil.
- ¿Pero qué dices? ¿González me rebaja 4 euros el IRPF? –Definitivamente su sonrisa se evaporó– Tantos titulares y tanto bombo para 92 euros al año. ¿Y tú cuanto te ahorras?
- Pues en mi caso, que con mi trabajo de media jornada gano 10.000 euros al año, vamos a ver. 10.000 menos 7.000 de mínimo, 3.000. 3.000 por 0’4 por ciento me salen 12 euros. Claro, como en tu caso, 4 de cada mil.
Manolo ya había pasado directamente al cabreo.
- 12 euros, ¿te ahorras 12 euros de impuestos en todo el año? ¡Es indignante! Entre lo tuyo y lo mío no pagamos ni el comedor del cole de un mes, ahora que la Comunidad de Madrid nos ha quitado la beca.
- Pues sí, esto es lo que hay –le dije.
- Y mi jefe que debe ganar 600.000 euros al año, ¿cuánto se ahorra?
- 2.372 euros.
- ¿2.372? ¡2.372! Y entre tú y yo poco más de 100. Y me decía esta tarde en su despacho que como la reforma era proporcional el ahorro era igual para todos. ¿Será posible? Ya me han dado la noche, me voy a la cama.
- No te pongas así, ¿qué esperabas? Pero a ver si el próximo día que te inventes problemas de mates para la niña los sabes resolver bien