diumenge, 23 de juny del 2013

FOTOS DE L'ASSAIG AL JARDÍ DEL BOU I

























Ave, César, Alicante te saluda

Estació del Camp de Tarragona.
David Torres

La inauguración de obras públicas es una de las funciones más vistosas de los políticos. Antaño se hacía con una con una botella de champán o con una cinta y unas tijeras, pero no están las cosas para despilfarrar y Mariano ni siquiera usó un cortauñas. Los jefazos suelen acudir a las obras públicas fundamentalmente en dos momentos: para poner la primera piedra y para celebrar la última piedra. Es conmovedor verlos posar con un casco de obrero en la cabeza, igual que en una fiesta de disfraces, sosteniendo felices la pala mientras buscan de reojo el enchufe. Para la inmensa mayoría de ellos, ese momento es lo más cerca del trabajo que van a estar en toda su vida: es normal que quieran tener una foto de recuerdo.
Pero lo cierto es que, para sacarse una foto y hacer el chorra, quedaría mejor una modelo, una chica florero de ésas que ellos suelen contratar como asesoras, secretarias, ayudantes personales o vaya usted a saber. Así, aparte de alegrar la vista, el florero serviría para algo útil, aunque entonces el político podría pensar, con razón, que si un político no sirve para estrenar un tren, entonces para qué cojones sirve. En la próxima campaña electoral el partido podría ahorrarse un intermediario y colocar directamente al florero.
Recuerdo hace unos años cuando Gallardón (el Indiana Jones de los alcaldes, un hombre freudiano que se pirra por cualquier clase de túneles, socavones y agujeros) fue a inaugurar una estación de metro o algo por el estilo. Hubo un momento de auténtico pánico cuando Gallardón se enfrentó al torno y se quedó mirando el billete como si fuese la píldora de Matrix, la que comunica con el otro mundo. Durante un instante interminable los guardaespaldas erizaron músculos y el séquito tragó saliva a litros, hasta que Gallardón acertó por fin con la ranura correspondiente. Después el alcaldeso logró salvar la trampa de las escaleras mecánicas y accedió al vagón que lo esperaba intacto, limpio y reluciente, como en sus mejores sueños subterráneos.
Ayer el presidente, el príncipe Felipe y un par de ministros escenificaron la misma pantomima del transporte público, un verdadero esfuerzo actoral porque ellos están acostumbrados al avión o la limusina, que al fin y al cabo también son transportes públicos. Los cuatro iban tan normales, charlando de sus cosas, o sea de nada serio, aunque para representar mejor la rutina deberían haber sacado un libro, un periódico, un ordenador o haberse puesto a jugar a las cartas. Por el camino se fueron subiendo más políticos; en una estación, Alberto Fabra; en otra, Cospedal, como si hubieran quedado todos para darse un baño en Alicante, y un baño es lo que les esperaba: de multitudes, como dicen los cronistas cursis. En el destino previsto, donde llegaron con dos años de retraso, a la par que sus promesas, Mariano pegó un hábil cinturazo para evitar a la alcaldesa Sonia Castedo, porque ya se había dado un baño de imputados unos días antes. En el viaje de vuelta, que se sepa, regresaron cada uno por su lado en diversos transportes públicos y las facturas volvimos a pagarlas nosotros, que para eso estamos.

dissabte, 22 de juny del 2013

L’AVE NOSTRE DE CADA DIA, DONEU-NOS-EL AVUI...

Estació de las Delicias (Saragossa) 

Madrid estrena avui el seu segon AVE a la platja. Amb aquest titular, el Periódico de Catalunya de dilluns 17 de juny, començava un petit estudi sobre la situació de l’alta velocitat espanyola. Amb la posada en funcionament de la línia Madrid-Alacant, els ciutadans de la capital i cort, tenen una segona opció per arribar a la costa llevantina després de la línia Madrid-València.
I es clar, davant d’una situació així, cal preguntar-se quins criteris segueix el Ministerio de Fomento a l’hora de prioritzar les línies d’alta velocitat. Tinc el convenciment que una segona línia cap al Llevant no portarà més gent a les platges, sinó que, simplement, diversificarà l’oferta. I els ciutadans de Madrid, encantats...
Estadísticament, la zona espanyola més poblada i que més recursos genera (industrials, agrícoles, comercials, etc.) és l’Est peninsular (des de Girona a Almeria); a més, inclou tres dels ports marítims més importants de la península (els de Barcelona, Tarragona i València); en canvi, en qüestió d’infraestructures, estem com estàvem a la dècada dels 70. 
 
Durant el discurs d’inauguració de l’AVE Madrid-Alacant, Rajoy va dir que volia prioritzar el corredor ferroviari del Mediterrani, però no va donar cap data, per tant, estem al mateix punt mort que ens trobàvem abans de l’acte. El que no va explicar Rajoy és el perquè en època de crisi es segueixen construint línies d’alta velocitat i a sobre, subvencionant els bitllets (des de Madrid a Alacant serà més barat que fer el mateix trajecte en sentit contrari)
Però si ho concretem al nostre territori, ens en adonarem que el greuge encara és molt més gran. L’estació de referència es denomina l’Aldea-Amposta-Tortosa, però s’ubica al terme de l’Aldea i, des d’aquí, el transport públic fins Amposta i Tortosa és pràcticament inexistent.  
Si et vols desplaçar cap a Barcelona o València ho has de fer per la N-340, la nacional més transitada de l’estat o per l’autopista de pagament AP-7. L’alternativa que havia suposar l’autovia A-7, està aturada des de fa anys:  pel S a l’alçada de Cabanes (curiosament on es va construir l’aeroport de Fabra) i pel N a l’Hospitalet de l’Infant. Per tant, se salta tot el nostre territori.
I si parlem de les comunicacions ferroviàries, el tren més ràpid que circula per aquí és l’Euromed, que també passa de llarg i la resta de trens són antiquats i lents. Anar de l’Aldea a Barcelona costa pràcticament dues hores, el mateix temps que costava fa 40 anys. Segons la Plataforma pels Trens Dignes, el problema s’agreujarà considerablement quan entri en funcionament l’ample europeu, ja que des de l’estació de Tortosa a Tarragona s’hauran de fer dos transbordaments.  
Cada cop que s’inaugura un tram de l’alta velocitat, els discursos del nostres mandataris es repeteixen: S’ha situat a Espanya a la primera categoria dels transports. Però la realitat és ben diferent, ja que la majoria del territori espanyol té infraestructures de tercera.  
La qüestió és saber fins quan s’invertiran tants milions en una alta velocitat deficitària en detriment de les línies convencionals que, a la pràctica, són molt més útils.  
La resposta, encara que sembli complicada, és molt senzilla: Fins que els nostres governants deixen de pensar que per a passar a la història, fa falta inaugurar al menys una línia de l’AVE.
Franco inaugurava pantans...

El PPCV asegura que el valenciano se escribía en el siglo VI antes de Cristo

El PP ha presentado en las Cortes valencianas una proposición no de ley en la que pide que la Generalitat se dirija a la Real Academia Española (RAE) para que en la próxima edición del diccionario "se reconozca al valenciano su categoría de lengua o idioma propio de los valencianos, que se habla en la mayor parte de la Comunitat".
En su defensa, dice que el habla de los valencianos "parte, sin duda, de la más profunda prehistoria, se escribe ya desde el siglo VI antes de Cristo con el lenguaje ibérico y, después de las aportaciones sucesivas a partir de las fenicias, griegas y latinas, ha llegado a
nuestros días en la forma en la que la conocemos".
En esta iniciativa, fechada el 13 de junio y firmada por el portavoz del PP, Jorge Bellver, los 'populares' señalan que "después de diversas decenas de miles de años de vida durante la prehistoria", los valencianos "comenzamos a escribir uno de los períodos de
más brillantes de la historia de España".
Asimismo, señalan que "después de más de 2.000 años de vida intensa, los valencianos podemos, desde aquí y desde ahora, escribir nuestra historia y, sobre un fondo común y permanente, las sucesivas aportaciones de otros pueblos, que hemos asimilado y
transformado y la han ido enriqueciendo por nuestra apertura y permeabilidad a influencias foráneas".
"Las aportaciones griegas y romanas, visigodas y bizantinas, musulmanas, castellanas, aragonesas, catalanas, europeas y mediterráneas en general, africanas, judaicas y americanas se asimilan transformándolas en la dirección de nuestra propia idiosincrasia", subraya el grupo popular.

 
UNA IDENTIDAD PROPIA
El PP destaca que, actualmente, "nuestro idioma valenciano, después del fecundo Siglo de Oro de las letras valencianas, el primero de la península y, después del cultivo posterior durante un poco más de 600 años, ha conseguido una identidad y personalidad propias que permiten considerarlo, sin duda, como una legua o idioma".
"Los valencianos tenemos todo el derecho del mundo de denominarla y regularla como consideremos conveniente, tal y como han reconocido los más reputados e independientes filólogos y lingüistas", añade la formación 'popular', que explica que el Estatuto de
Autonomía de la Comunitat Valenciana "recoge como lengua valenciana la propia de nuestro pueblo, situándola como una de nuestras principales señas de identidad".
El grupo popular explica que la RAE, en su diccionario de 1959, define el valenciano como "lengua hablada en la mayor parte del antiguo Reino de Valencia". Sin embargo, lamenta que "sorprendentemente" en su edición de 1970 "y sin que haya dado hasta ahora
una explicación fehaciente", apareció "sobre la base de una ficha desconocida del académico don Rafael Lapesa, una nueva definición del valenciano como variedad del catalán".

 
LA "GUERRA DE LOS SÍMBOLOS"
La oposición ha criticado que el PP vuelva a la "guerra de los símbolos". Asimismo, el diputado socialista Josep Moreno, en una rueda de prensa, ha lamentado que la prioridad del PP en materia de cultura sea "determinar que en el pleistoceno los trogloditas ya
hablaban valenciano". Al respecto, se ha preguntado "¿Maluenda --viceportavoz del grupo popular-- ya era diputado en el pleistoceno?".
Por su parte, el portavoz de Compromís, Enric Morera, ha anunciado que su coalición está dispuesta a llevar la propuesta lingüística del PPCV a los tribunales en el supuesto de que sea tramitada por la Mesa de las Corts.