dijous, 5 de desembre del 2013

VOLEU CONÈIXER A MON TIO LEONARDO MARTÍ?






Us he parlat d'ell motes vegades. Mont tio Leonardo va ser qui em va explicar la majoria d'anècdotes sobre la guerra Civil Espanyola, com per exemple la narració que ha servit per a fer el curtmetratge La Fatarella 1938.
Si voleu llegir alguna cosa sobre ell:

UNA HISTÒRIA DE LA HISTÒRIA  (article publicat a Vinaròs News) 

IMATGES D'ESPAIS HISTÒRICS DE LA GUERRA CIVIL ESPANYOLA

LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA MÁS ALLÁ DE LA FONTERA FRANCESA 

UNA JORNADA DE RODATGE


¿Quién está saliendo de la crisis?

Vicenç Navarro

El título de este artículo no es del todo acertado, pues implica que antes de salir de la crisis, alguien estaba en crisis y, sin embargo, ha habido personas que nunca han experimentado negativamente la crisis. En realidad, varios estudios muestran que en la mayoría de los países a los dos lados del Atlántico Norte, el 10% (no solo el 1%) nunca ha estado en crisis. Y ha aprovechado la crisis del 90% de la población para mejorar todavía más su riqueza, desde su renta hasta su propiedad. Y los números hablan por sí mismos.
Así, en EEUU, donde los datos son, por lo general, creíbles, se puede ver que la mayoría de la riqueza que se ha ido creando durante estos años de crisis ha ido a parar a este 10%. Robert Reich (que había sido Ministro de Trabajo durante la Administración Clinton, y que, desde que dejó el cargo, se ha ido convirtiendo en una de las voces más críticas hacia el Estado federal y su instrumentalización por el capital financiero -que quiere decir la banca-, instrumentalización que también ocurrió durante la Administración Clinton en la cual Robert Reich sirvió) ha escrito extensamente indicando que a la Bolsa (es decir, Wall Street, el centro financiero de EEUU) le ha ido muy bien, pero que muy bien. Se ha disparado en los últimos años de la crisis. Solo este año ha crecido un impresionante 24%, siendo el mayor beneficiario de esta situación el 10% de renta superior, que posee el 80% de todas las acciones que se cotizan en la Bolsa (es más que probable que una situación semejante haya estado también ocurriendo en España). Robert Reich (que es ahora Profesor de Políticas Públicas de la Universidad de California en Berkeley), se refiere a una encuesta a las familias estadounidenses (hecha por el American Affluence Research Center) en la que se muestra que las familias pertenecientes a este 10% indicaban que su situación financiera era mucho mejor ahora que antes de que comenzara la crisis.
Mientras, la situación del 90% continúa siendo más que preocupante. El 75% de la población indica que el estado de la economía es negativo o pobre. Es difícil alcanzar niveles más altos de insatisfacción. Y tal insatisfacción está basada en un sufrimiento generalizado entre la población El porcentaje de niños en EEUU que recibe algún tipo de ayuda federal y/o estatal en algún momento de su infancia para poder comer, ha alcanzado la cifra del 50%, el mismo porcentaje de todos los adultos (de 18 a 65 años). Nunca antes se había llegado a estas cifras de dependencia de ayudas del Estado, incluso en áreas tan vitales como el alimento y la nutrición.
Ahora bien, lo que es incluso más notorio de distinción es que este enorme crecimiento de las desigualdades (una minoría rica que se ha ido enriqueciendo incluso más a costa de la mayoría, la cual se ha ido empobreciendo) ha sido consecuencia de las políticas públicas llevadas a cabo por el gobierno federal, que ha ayudado enormemente (y por todos los medios) al capital financiero, es decir, a la banca y a lo que en EEUU se llama la Corporate Class, es decir, a los miembros propietarios y gestores de las grandes corporaciones del país. Como denunciaba recientemente la senadora Elizabeth Warren, en su revisión de las agencias reguladoras de la banca (ver esta sesión del Congreso en mi blog www.vnavarro.org), es imperdonable que los grandes bancos responsables de la crisis sean hoy todavía más grandes y más opacos que al inicio de la crisis, y todo ello con la ayuda del gobierno federal. Según la senadora Warren, los cuatro bancos más importantes de EEUU son nada menos que un 30% más grandes de lo que eran antes de comenzar la crisis, y controlan más del 50% de todos los activos bancarios del país. Pero, aun cuando la banca y compañías de seguros han sido las más beneficiadas, otros sectores de la clase corporativa se han beneficiado también enormemente. ¿Por qué esta ayuda masiva y sin precedentes a la Corporate Class?
La respuesta es fácil de ver cuando se ve quién financia las campañas electorales del Congreso de EEUU. En uno de los informes publicados por el centro Citizens United que analiza quién financió en el año 2012 las campañas electorales en EEUU, el lector encontrará la respuesta. La lista de donantes a candidatos al Congreso es la lista de quién es quién en la Corporate Class, es decir, quién está al servicio de quién. Las mayores empresas bancarias en Wall Street, las grandes compañías de seguros, las grandes compañías energéticas, el American Petroleum Institute, ExxonMobil, y un largo, largo etcétera. Son las que financian el Congreso de EEUU. Y España está yendo en esta dirección en líneas muy rápidas y a marchas forzadas. ¿Alguien duda de que los partidos gobernantes hoy en España y en Catalunya hayan recibido dinero de grandes compañías, incluidos bancos?
En realidad, la gran mayoría de partidos políticos (y de medios de información y persuasión) están endeudados hasta la médula. Y la deuda es con los bancos, que tienen un enorme poder político, sin que nadie les haya elegido. En una democracia donde, en teoría, cada ciudadano tiene que tener la misma capacidad de decisión en el proceso político, los banqueros tienen muchísima (repito, muchísima) más influencia política que usted o yo. En realidad, ellos son los que mandan (ver mi libro con Juan Torres Los amos del mundo. Las armas del terrorismo financiero). Y a eso tienen la desfachatez de llamarlo “democracia”.

dimecres, 4 de desembre del 2013

ELS IMPOSTOS ‘CATALANS’



Segurament, el diari que es mostra més clarament a favor de fer la consulta independentista, és el Punt Avui. Si donem un cop d’ull qualsevol dia, ens fixarem que tant en els continguts com en els articles d’opinió, domina el sentit nacionalista i molt proper a les tesis d’ERC, ANC, Òmnium, etc.
Dilluns per exemple obria amb aquest titular: La hisenda pròpia avança. El cert és que per a ser el principal titular de la portada, els altres mitjans n’han parlat molt poc (avui ho han fet al Telenotícies migdia de TV3) Però fixeu-vos amb els subtitulars: Estructura. El govern crearà un cos de gestors tributaris per a poder recaptar tots els impostos a mitjan 2014. I també: Part. L’Agència Tributària Catalana gestionarà uns 1.700 milions l’any que ve en impostos propis o cedits.
Però que m’estan dient? 1.700 milions? I què farà Catalunya amb 1.700 milions?
Mireu, només el pressupost de la ciutat de Barcelona per al 2014 s’eleva a 2.574 milions d’euros i el del Barça per a l’actual campanya és de 509 milions. I la pròpia Generalitat ha pressupostat per a l’any 2014 20.373 milions... Per tant, els 1.700 milions que gestionarà l’Agència tributària Catalana és queden molt curts.
Sobre el primer subtitular: Estructura. El govern crearà un cos de gestors tributaris per a poder recaptar tots els impostos a mitjan 2014, es poden dir moltes coses:

1.- Què l’Agència Tributària Catalana ja fa molts d’anys que existeix i, fins ara, els principals impostos que gestionava (cedits pel govern central) eren el de Transmissions Patrimonials i Actes Jurídics Documentats i el Impost sobre el Patrimoni (els anys que aquest ha estat en vigor) No sé si encerto amb el qualificatiu, però em sembla que són les escorrialles dels impostos. Mentre la Generalitat gestiona aquest, l’Estat gestiona l’IVA, l’IRPF, els impostos especials que graven l’alcohol, el tabac, el joc...

2. Per a que la Generalitat pugui recaptar tots els impostos (tal com diu el subtitular), caldrien dues coses (excloents entre si)

a) Què l’Estat els cedís totes les competències i no crec que per al 2014 ho faci i

b) Què Catalunya esdevingués un estat propi, cosa que per al 2014 serà impossible, ja que encara no tenim data per a la consulta però, si es fa, es faria en el darrer trimestre de l’any.

3. Quan parla de gestors tributaris (a TV3 han parlat d'inspectors), exactament de què estem parlant? L’Agència Tributària estatal té inspectors i tècnics, per tant el gestor és una figura que s’hauria de crear, bé, no exactament, perquè internament tenim gestors i sotsgestors, es a dir, administratius i auxiliars.

Per molt optimista que sigui el diari, des del meu punt de vista encara queda molt de camí per recórrer i, de moment, caldrà seguir amb el recurs d’anar a pidolar a Madrid a veure que ens donen i quan ens ho donen.   

XIQÜELOS I XIQÜELES DEL DELTA. ALCANAR IV



















Marhuenda, gravemente intoxicado tras morderse la lengua

“HA SALVADO LA VIDA PORQUE FUE A PRIMERA HORA DE LA MAÑANA Y LLEVABA VARIAS HORAS SIN HABLAR”, SEGÚN SE LEE EN EL PARTE MÉDICO

La Sexta ha estado en un tris de perder a su tertuliano más popular, el director de La Razón Francisco Marhuenda, quien se mordió la lengua ayer a primera hora de la mañana y sufrió por ello una grave intoxicación que casi acaba con su vida.
Marhuenda se había levantado hacía poco, había tomado un café y se disponía a hacer caca. “Al apretar un poco más de la cuenta se mordió la lengua y el veneno acumulado durante años se propagó por su organismo en menos de un minuto”, aseguran fuentes cotillas.
De hecho, según el parte médico hecho público por Iñaki López, presentador de La Sexta Noche, el tertuliano solo ha sobrevivido “porque llevaba varias horas sin hablar” y las toxinas se habían diluido durante la noche. López ha aprovechado para anunciar que, mientras Marhuenda se recupera, su lugar en la tertulia lo ocupará el cuervo Rockefeller, aunque sin la ayuda de José Luis Moreno.

LA FOTO DEL DIA 4-12-2013

Aquest matí, mentre comprava el pa, es preguntaven que feia un camió de bombers al costat del Pere Mata. No ho sé, igual feien un simulacre d'evacuació.
Però la foto l'he fet per a que pugueu veure les pintades reivindicatives que portava.
Sí, ja sé que fa molt de temps que les porten, però fins avui no havia tingut ocasió de fer una foto.
Quina diferència amb altres cossos que depenent de la Conselleria d'Interior de la Generalitat. I no nomeno ningú...



Detall de les pintades. A la part esquerra posa: Rescatem persones, no bancs. 

¿Mayoría silenciosa o amordazada?

Jaume Asens y Gerardo Pisarello

La “mayoría silenciosa” se ha convertido en una categoría central de la política española actual. En manos del Gobierno, es el arma arrojadiza contra cualquier movilización que cuestione sus políticas. Los que protestan —contra los recortes, contra las privatizaciones, exigiendo mayor democracia— son siempre una minoría. Ruidosa, extremista, invariablemente manipulada. La “mayoría silenciosa”, en cambio, sería la expresión ontológica de una sociedad civilizada. La que se queda en casa, la que soporta estoicamente los ajustes y las exhibiciones de impunidad de los que mandan. El problema se produce cuando las minorías ruidosas comienzan a crecer. O cuando amenazan con votar como no deberían. En esos casos, la “mayoría silenciosa”, o mejor, “silenciada”, ya no es un concepto descriptivo. Es algo que conviene crear. Aparatosamente, a través de una mayor represión directa. O de manera sutil, a través de medidas que neutralicen o desgasten a quienes se resisten a entrar en razón y que dificulten el control judicial. La reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana o la propuesta de restricción del derecho de huelga deben entenderse dentro de esta última estrategia.
La idea de estrechar el cerco contra la protesta social ha estado presente desde un primer momento en los planes del Partido Popular. El Gobierno, de hecho, ha acompañado cada movilización en su contra con un anuncio de restricción de libertades y de endurecimiento del marco de sanciones existentes. Primero fue la reforma del Código Penal, pensada para erradicar las ocupaciones pacíficas y reivindicativas de entidades bancarias, los bloqueos simbólicos de transportes públicos o el ciberactivismo en las redes sociales. Una ofensiva punitiva que permitía llevar al banquillo de los acusados a activistas del 15-M, Yayoflautas, miembros de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) o integrantes del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT).
Este tipo de medidas se combinaría con una progresiva ampliación de los márgenes para la represión policial de la protesta. Tras la aparición del 15-M, numerosos organismos de derechos humanos han detectado un preocupante aumento de los abusos policiales vinculado a las protestas contra las medidas anti-crisis. La mayoría de ellos no han merecido siquiera la apertura de un expediente sancionador. Por el contrario, casi siempre han contado con el aval institucional. El crédito casi ilimitado concedido a los agentes en relación con las víctimas y otros testigos ha permitido ampliar las vías represivas de alta y baja intensidad: desde los maltratos directos y las detenciones e identificaciones arbitrarias, hasta la imposición de multas desproporcionadas, pasando por las constantes grabaciones de manifestantes, incluso en aquellos casos en los que no estuvieran cometiendo ilícito alguno.
La llamada Ley mordaza viene a reforzar el corporativismo y la impunidad policial. Ni grabaciones ni difusiones de imágenes de agentes de las fuerzas de seguridad en el ejercicio de sus funciones. Toda una forma de censura que acabará vaciando el derecho ciudadano a obtener información veraz y obtener pruebas de actuaciones policiales ilegales. No en vano, el diseño de la reforma ha sido encomendado a un inspector vinculado a las unidades de antidisturbios de la Policía Nacional. Tampoco es casual que uno de sus responsables políticos haya sido un Secretario de Estado de Seguridad que ha defendido sin ambages el uso de cuchillas “anti-migrantes” en las vallas de Ceuta y Melilla.
De aprobarse la reforma del gobierno, el número de infracciones administrativas se incrementará de forma notable: de las 39 previstas en la llamada Ley Corcuera a 55. El nuevo repertorio de conductas sancionables se ampliaría a escraches, disolución de manifestaciones con vehículos (como las realizadas en Cataluña contra los peajes), protestas frente a instituciones como el Congreso de los Diputados o durante la jornada de reflexión electoral (como las realizadas por el 15-M). Las sanciones también se incrementarían, pudiendo llegar a multas de hasta 30.001 euros. La filosofía de fondo de la propuesta no carece de lógica: el Gobierno piensa que una multa cuantiosa puede contribuir a configurar su soñada “mayoría silenciosa” con igual o mayor eficacia que una carga policial, que unos días de encierro o que un par de golpes en una furgoneta o en una comisaría.
Hace tiempo, en realidad, que la utilización de la llamada “buro-represión” ocupa un lugar prioritario en las estrategias más sutiles de desgaste y de neutralización de la protesta social. Las multas no solo engrosan las arcas de las Delegaciones de Gobierno. También obligan a activistas y militantes a desviar sus escasos recursos a tareas que no tienen que ver con sus exigencias inmediatas y a convocar constantes actos de solidaridad para afrontar las sanciones. El objetivo no es reemplazar iniciativas más duras -como la reforma del Código Penal- por otras más blandas. De lo que se trata es de complementarlas. El intento de Interior por llevar a la Audiencia Nacional las protestas ante el Congreso, o el escrache a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a un juzgado de Madrid, se saldó con un rotundo fracaso. Los jueces primaron la libertad de expresión y emitieron duros autos contra la actuación policial. Las sanciones administrativas permitirán sortear ese contratiempo. Alcanzarán a muchas más personas y podrán ser impuestas directamente por las Delegaciones de Gobierno, sin control judicial previo. Quien quiera recurrir deberá pagar no solo los gastos de abogados y procuradores sino también unas tasas de hasta 2.750 euros. Un  obstáculo, en la práctica, de difícil o imposible superación para la mayoría de los afectados.
El objetivo de la reforma parece claro. Reforzar la impunidad policial y complementar la profundización del ajuste social con un nuevo ajuste penal. O mejor, con un ajuste penal administrativo, menos garantista pero tan o más eficaz que este último. Esta combinación entre represión dura y blanda no tiene otro propósito que infundir miedo y convertir a la supuesta minoría ruidosa que desafía al Gobierno en una mayoría amordazada y obediente. Es posible que sus impulsores se salgan con la suya. Pero también podría ocurrir lo contrario. Al amenazar con multas desorbitadas a quienes han perdido su trabajo y su casa, a quienes ya están endeudados o se han visto condenados a una precariedad insoportable, el Gobierno juega con fuego. No solo porque difícilmente le servirá para detener a quienes tienen poco o nada que perder, sino porque entre esos sectores hay mucha gente, cada vez más, que le dio su voto en las últimas elecciones. Negar esa realidad es de necios. Y si el Gobierno insiste en hacerlo, si insiste en imponer por la fuerza el silencio y la resignación, al tiempo que airea su propia impunidad, bien podría ocurrir que el ruido de la indignación, más temprano que tarde, acabe por romperle los tímpanos.

 

dimarts, 3 de desembre del 2013

UCRAÏNA



La majoria dels polítics espanyols i molts de la UE utilitzen la política de la por per dissuadir els catalans de la voluntat de convertir-se en estat propi: què si quedarem fora de la UE, què si no podrem utilitzar l’Euro...
Sobre l’Euro ja he explicat més d’un cop que no hi hauria d’haver cap problema, ja que són diversos els països (anomenats de la zona euro) que, sense pertànyer a la UE tenen com a divisa l’Euro: Andorra, Mònaco, el Vaticà, Sant Marino, Malta i Montenegro.
Sobre la inclusió de Catalunya a la UE, evidentment, no seria automàtica, però previnc que tampoc faria falta el vot unànime dels països membres en aquell precís moment.
Sembla ser que els acords de la UE res diuen sobre el que passaria en el cas de que un país que formant part d’un estat membre, esdevingués independent; per tant, o es legisla ràpidament o caldrà improvisar, tal i com es va fer amb la unificació d’Alemanya. Recordeu (sobre tot els més joves) que Alemanya es va fraccionar en dos després de la II Guerra Mundial: la de l’Oest o Federal i la de l’Est o Democràtica. Quan va caure el mur de Berlín, finalment es van poder unificar les dues Alemanyes i els països membres de la UE no van posar ni un sol impediment per a que l’altra part, de forma automàtica hi entrés a formar part.
No sabem encara el que passarà amb Escòcia, però, a hores d’ara, el seu procés secessionista porta avantatge sobre el català. Ja sé sap quina pregunta es farà així com la data de la consulta: el 18 de setembre de 2014, una setmana després de la Diada.
Pel que fa a Catalunya, sembla que la situació està patint una aturada tècnica o dit d’una altra manera: no hi ha acord entre els partits que s’han postulat clarament per fer la consulta. Si és cert que la data i el text de la pregunta s’hauria de saber abans de Cap d’Any, ja caldrà que es donin pressa, perquè sinó els pot agafar el toro...
Arribat a aquest punt, potser algú de vosaltres us preguntareu perquè he titulat Ucraïna el meu comentari d’avui i m’he limitat a parlar de la situació catalana. Què hi té que veure una cosa amb l’altra?
Molt senzill. Aquest passat cap de setmana, els dirigents de la UE van fer una cimera a aquell país que un dia va pertànyer a la Unió de Repúbliques Socialistes Soviètiques. La intenció era apropar aquell país a la UE, mentre el seu govern es mostrava reticent, ja que mira més cap a Rússia que cap a la vella Europa. No obstant això, sembla que la porta està tancada i, per tant, des de la UE s’insistirà per a que Ucraïna es replantegi la situació i en demani l’ingrés.
Imagineu-vos l’inversemblant de la situació: La Unió Europea està demanant quasi de genolls que Ucraïna entri; la mateixa Unió Europea que, en el cas de Catalunya, un país de clara vocació europeista, li negaria l’entrada. Compreneu la situació? Jo, per molt que m’hi esforci, no.