Sabemos que el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, un dirigente popular
xenófobo, ha sido criticado desde los partidos de la oposición por
haberse ido de vacaciones a Omán, a ratos vestido de jeque árabe. Pero
lo cierto es que Albiol sigue siendo alcalde de la segunda ciudad de
Cataluña -después de Barcelona- que es Badalona en cuanto a número de
habitantes.
¡Qué tomadura de pelo nos está haciendo Artur Mas! García-Albiol es alcalde de Badalona gracias a los pactos entre CiU y el PPC. O sea, entre los separatistas y los separadores. Ha transcurrido bastante más de un mes desde que Mas anunciara su apuesta secesionista y resulta que tanto los soberanistas como los centralistas mantienen sus vínculos recíprocos.
Oxígeno de parte de Sánchez Camacho
Lo sucedido en la coalición de CiU y de la derecha española sigue igual, o muy similar, que cuando -hace dos años- Mas se abrazó a Alicia Sánchez Camacho, la lideresa popular, para pedirle oxígeno. Albiol sigue gobernando el Ayuntamiento badalonés. Lo mismo acontece en el Ayuntamiento de Castelldefels o el de Sitges, entre otras ciudades o pueblos de Cataluña. ¿Qué ocurre en la Diputación de Barcelona?
Independentismo y ambigüedad
CiU pretende jugar al independentismo con ERC y, entre tanto, a la ambigüedad con el Partido Popular. Artur Mas que, hace unos años, se personó en una notaría para dejar bien claro que nunca se alianzaría con el PP, rompió su compromiso y se quedó tan ancho. Todo esto confirma que la gran marcha hacia la independencia no es más que un instrumento en manos de un oportunista, como, en realidad, es Mas. Y, en la otra acera, lo es Mariano Rajoy.
En un barrizal
Mas se ha metido en un barrizal e ignora cómo podrá salvarse de la secesión catalana. El Mesías y/o el Bolívar catalán no tienen todavía una salida al laberinto del denominado Estado propio. Les encantaría jugar al rollo de la patata, cogidos de la mano CiU, ERC y PPC. Pero ese escenario parece hoy por hoy imposible. Mas continúa demostrando que no es para nada de fiar.
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM
¡Qué tomadura de pelo nos está haciendo Artur Mas! García-Albiol es alcalde de Badalona gracias a los pactos entre CiU y el PPC. O sea, entre los separatistas y los separadores. Ha transcurrido bastante más de un mes desde que Mas anunciara su apuesta secesionista y resulta que tanto los soberanistas como los centralistas mantienen sus vínculos recíprocos.
Oxígeno de parte de Sánchez Camacho
Lo sucedido en la coalición de CiU y de la derecha española sigue igual, o muy similar, que cuando -hace dos años- Mas se abrazó a Alicia Sánchez Camacho, la lideresa popular, para pedirle oxígeno. Albiol sigue gobernando el Ayuntamiento badalonés. Lo mismo acontece en el Ayuntamiento de Castelldefels o el de Sitges, entre otras ciudades o pueblos de Cataluña. ¿Qué ocurre en la Diputación de Barcelona?
Independentismo y ambigüedad
CiU pretende jugar al independentismo con ERC y, entre tanto, a la ambigüedad con el Partido Popular. Artur Mas que, hace unos años, se personó en una notaría para dejar bien claro que nunca se alianzaría con el PP, rompió su compromiso y se quedó tan ancho. Todo esto confirma que la gran marcha hacia la independencia no es más que un instrumento en manos de un oportunista, como, en realidad, es Mas. Y, en la otra acera, lo es Mariano Rajoy.
En un barrizal
Mas se ha metido en un barrizal e ignora cómo podrá salvarse de la secesión catalana. El Mesías y/o el Bolívar catalán no tienen todavía una salida al laberinto del denominado Estado propio. Les encantaría jugar al rollo de la patata, cogidos de la mano CiU, ERC y PPC. Pero ese escenario parece hoy por hoy imposible. Mas continúa demostrando que no es para nada de fiar.
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM