Mi compañera y yo nos enteramos hace un par de días de que el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, venía a Malta el viernes, con motivo de la cumbre del grupo 5+5. Desde entonces pensamos que teníamos que hacer algo, que no podíamos dejar que pasara por Malta sin que nos oyera. Y más después de que sus nefastas políticas hayan sido en gran parte las responsables de que nos viniéramos a trabajar a este país con una beca, después de no encontrar nada en España con dos carreras.
Así que allí estábamos, a las 14:30, esperando a que Rajoy y el resto de presidentes/primeros ministros salieran del Albergue De Castilla para ir a hacerse la foto a los jardines de Baraka. Llevábamos dos pancartas, una grande, en la que habíamos escrito, "Spain for sale" (como guiño a las españolas que ayer boicotearon un acto del ministro De Guindos en Londres), y otra pequeña en la que escribimos, en inglés y en castellano "No nos representas". No había prácticamente nadie al otro lado de las vallas de seguridad, así que pensamos que éramos las únicas dispuestas a decirle cuatro cosas al Presidente.
Antes de que empezaran a aparecer diversas autoridades, una pareja de andaluces se ha puesto a hacer fotos a nuestro lado. Hemos empezado a hablar con ellos, por el hecho de ser todos españoles, y entonces ha entrado en escena el ministro de exteriores, García Margallo. El señor le ha felicitado, a lo que el ministro ha contestado con un sonriente "Gracias". Ha sido en ese momento cuando mi compañera le ha gritado: "¡Estamos pagando vuestra crisis!". El ministro, que no parece que se enterara demasiado bien, ha preguntado "¿Cómo?", y cuando se lo ha repetido, nos ha dado la espalda, como era de esperar.
Cuando el ministro se ha alejado, ha empezado una cordial discusión sobre Zapatero, Rajoy, y la maravillosa plantilla de políticos de los que hacemos gala, con nuestros vecinos andaluces. Faltaba poco para que saliera ya Mariano Rajoy, que lo ha hecho después del primer ministro italiano, Mario Monti. Cuando el Presidente ha asomado por la puerta, hemos desplegado las pancartas, y he gritado, "¡Rajoy, tu pueblo pasa hambre!". Con ello se ha abierto la veda al resto de gritos de protestas, y nos hemos dado cuenta de que no estábamos solas. Varios españoles, probablemente turistas, gritaban también, y otra pareja llevaba pancartas en las que podía leerse "Rajoy dimisión". El Presidente nos ha mirado en un primer momento, pero en cuanto se ha percatado de la situación, y como ya hiciera su ministro de Exteriores, se ha girado y marchado en dirección contraria sin mirarnos.
Mientras gritábamos, la policía se ha acercado hasta donde estábamos para pedirnos que no gritáramos y quitáramos la pancarta. Mi compañera ha hecho referencia a la libertad de expresión, y los policías han accedido a dejar que mostráramos la pancarta si dejábamos de gritar. Y así hemos hecho, porque en ese momento ha salido el Presidente de Francia, François Hollande, quien, al contrario del Presidente español, se ha acercado al pequeño grupo de franceses apostados en la valla de seguridad para saludarles. Al hablarles, ha dicho en inglés "veo que hay algunos manifestantes españoles por aquí", a lo que he contestado con un tímido "Sí, es verdad" en francés, y mi compañera le ha expresado en inglés, "ojalá nuestro Partido Socialista fuera como el suyo".
Después de estos momentos, nos hemos desplazado a otra zona, esperando a que Rajoy saliera de hacerse la foto en los jardines, para seguir recordándole lo que sucede en España y parece no importarle. Varias personas, francesas, italianas y españolas, se han acercado a nosotras para hacerse una foto con la pancarta.
Al finalizar el acto, y que los presidentes abandonaran Valletta, hemos vuelto a casa muy contentas. Pero ahí no ha terminado nuestra sorpresa, porque no sólo no nos imaginábamos que Rajoy nos escucharía aunque fuera de lejos (nos habían advertido de que la policía maltesa te puede detener sin motivo y no se anda con chiquitas), sino que no esperábamos que la protesta tuviera la repercusión que ha tenido en los medios. Para nosotras ha sido un orgullo que parte de la noticia de la visita de Rajoy a Malta haya sido que allá donde va, siempre hay españolas dispuestas a recordarle que la realidad en España es aterradora, y que ha perdido la legitimidad para otorgar el poder, si es que algún día la tuvo. Un placer ;)
Fuente original del artículo: http://mejorcontarlo.blogspot.com.es/2012/10/asi-hemos-recibido-rajoy-en-malta.html#!/2012/10/asi-hemos-recibido-rajoy-en-malta.html