dilluns, 18 de març del 2013

¿Son “tonterías”, don Mariano, las actuaciones judiciales sobre la mierda en Génova 13?

Ayer por la mañana, un día antes de que comenzara en Roma el Cónclave, el presidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy Brey, vino a decir sin decirlo -aunque eludió por supuesto entrometerse en tareas propias del Espíritu Santo, naturalmente- que si él tuviera que elegir Papisa, María Dolores de Cospedal García sería su candidata preferida.
Un lleno de prietas las filas
La verdad es que Rajoy Brey, en el desayuno de la élite popular, arropado por un lleno de prietas las filas y pocas bromas, se deshizo en loas y elogios a su número 2 en el partido. Fue una especie de canonización en vida [política], que la traslada directamente al paraíso genovés.
Un acto de desagravio
O fue quizás un acto de desagravio, tras los choques que ha mantenido con algunas compañeras populares, como Esperanza Aguirre que -al parecer- le llamó “imbécil” hasta dos veces. Rebosaba el hotel Ritz de público básicamente palmero y algunos observadores -próximos a la causa reaccionaria- volvieron a respirar de nuevo. Estaban todos, o casi todos, algunos haciendo de hombres buenos para pactar con Bárcenas y salir, por consiguiente, no tanto de la crisis, qué más les da -no la sufren- cuanto de la trama Gürtel.
El más famosos de los últimos tiempos
Pero faltaba uno, el más famoso de ellos en los últimos tiempos, Luis Bárcenas. No apareció Bárcenas, es evidente, aunque durante más de veinte años trabajara para el PP. Mientras tanto, se forró y ayudó a muchos a forrarse. No acudió al Ritz el tesorero infiel. Sin embargo, la sombra de Bárcenas daba vueltas por los salones del ayuno. Y entre risas y risas aparecían de pronto caras desencajadas. Asistió, por ejemplo, Rodrigo Rato, imputado por el desastre de Bankia, sin ir más lejos.
 El innombrable
Cospedal, con el auxilio de Carlos Floriano, el pasado fin de semana inauguraron una jornadas de debate en la sede nacional del PP. Asistieron a debatir, pero sin nombrar ni un minuto al innombrable, que es Bárcenas.  Advirtió la secretaria general que, salvo la crisis, “todo lo demás son tonterías” y “todo lo demás no tiene importancia”. Y añadió con Rajoy Brey que “lo demás, los dimes y los diretes y todo eso no importa”.
¡Cuanta falsedad!
¡Cuanta jeta! ¡Cuánta insidia! ¡Cuánta falsedad! ¿Son “tonterías”, don Mariano, las actuaciones judiciales sobre la mierda en Génova 13?
Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM

diumenge, 17 de març del 2013

ELS ALTRES SOCIALISTES I LES MANERES DE LA DRETA



Ja sabeu que no acostumo a escoltar tertúlies i debats polítics. Ahir vaig fer una excepció. Vaig arribar a casa tard i en posar la tele anava la “la Noche de la Sexta”. Entrevistaven a Tomás Gómez, una de les veus més crítiques dintre del socialisme espanyol i sobre el qui mai he amagat les meves simpaties. Com que m’agradava el que estava dient, vaig decidir quedar-m’hi a veure que donava de si.  
Tomás Gómez parlava de canvis de noms, d’estratègies, de coherència... Conceptes que, els qui em seguiu, segur que els heu llegit més d’una vegada als comentaris que acostumo a fer als meus escrits. Sense dubtar-ho, Tomás Gómez representa la meva manera de pensar.  
Hi va haver un moment però que de hi van poder intervenir els periodistes que acompanyaven al presentador de la Sexta. Quan va arribar l’hora de Francisco Marhuenda, director de la Razón, va donar una opinió molt pròpia de la dreta (fins i tot m’atreviria a dir extremadreta) d’aquest país. Va dir alguna cosa així: “Quan a Espanya mana la dreta, les esquerres consideren que són un govern il·legítim”. No senyor Marhuenda, no. Vostè està del tot equivocat. Els qui no peixent les víctòries de l’esquerra és la dreta casposa, retrògrada i caciquil que, desgraciadament, tenim a aquest país. En vols alguns exemples:
Després de l’ajustada derrota contra pronòstic de Felipe González l’any 1993, l’assetjament parlamentari d’Aznar al front del PP fent (fen pinça amb Julio Anguita) va ser constant. Segurament recordareu allò de: ¡Váyase señor González!”
Finalment aquell govern no va poder acabar la legislatura i Aznar va guanyar l’any 1996 amb una victòria més que ajustada i per majoria absoluta l’any 2000 on va començar el que ha estat, sense cap mena de dubte, el quatrienni més negre de la nostra història recent (Pla Hidrològic Nacional, Guerra d’Iraq, Prestige, Yak 42, etc.)
Un cop de sort per als socialistes (així podríem qualificar els atemptats de l’11 de març de Madrid del 2004), va fer capgirar un resultat electoral que el PP semblava tenir coll avall. El PP no ha paït mai aquella derrota electoral. Encara avui hi ha qui busca connexions entre els atemptats de Madrid, la banda terrorista ETA i el PSOE.
Després d’uns anys de certa bonança econòmica i social durant el govern de Zapatero, l’arribada de la crisi va fer que, un altre cop, els populars intensifiquessin la seva oposició amb un clar intent de recuperar, al preu que fos, el govern d’Espanya. Resultat: Zapatero no va poder acabar la legislatura i els Populars, sense gaires esforços, van tornar a recuperar el govern. El resultat és de tots coneguts.
A Catalunya, després de que Pasqual Maragall aconseguís formar el primer govern Tripartit, la reacció de la dreta catalana (CiU) va ser molt semblant.
I és que tan Espanya com Catalunya han estat terres de cacis, de senyorets acostumats a tenir treballadors en règim de semiesclavitud i gens acostumats a que la classe treballadora els guanyés el poder en uns sufragis universals, democràtics i lliures.
Els gens que porten aquesta mena de gent els porten a voler estar al poder al preu que sigui i sense cap tipus de mirament. El beneits són els treballadors que prefereixen donar-los el vot a canvi d’un plat de lentilles i poca cosa més.
Però atenció, avui en dia els cacics han mutat. Ara ja no són terratinents. Ara han adoptat noves formes. Segur que en coneixes algun.       

16è ASSAIG DE XIQÜELOS I XIQÜELES DEL DELTA I













Dimisiones

¿Cuántas dimisiones se pedirán en España al cabo del año? ¿Cuántas se materializarán? Yo creo que ni un 0,5%. ¿Por qué se piden, por vicio, por dañar al rival, por verdadero sentido de la responsabilidad crítica? Seguramente por las tres razones, de mayor a menor. ¿No se abusa de tanta petición? En la mayoría de los casos, no. ¿Por qué no cristalizan? Por suciedad política. ¿Cuándo deberían ser ineludibles? Si hay un proceso judicial, en mi opinión cuando se señale juicio oral, no cuando se es imputado. Sería una fuente de desmanes, y una concesión prematura al poder judicial. Si no hay proceso judicial, es más complicada la cosa: los jefes de los posibles dimitidos-cesados defienden su propio espacio de vigilancia y actuación. Entre quienes no dimiten hay auténticos artistas de la disculpa. ¿Qué haya tan pocas dimisiones es bueno para la convivencia democrática? No.
Así: ¿Debería dimitir el Jefe del Estado, es decir, el Rey, por su falta de transparencia, sus deslices privados, y su estado de salud?
¿Debería dimitir el presidente del Gobierno, señor Rajoy (creo), por haber incumplido todas sus promesas y por vivir y hacernos vivir en el engaño y la indignidad?
¿Debería dimitir el Jefe de la Oposición, señor Rubalcaba (creo), por haber hundido a su partido?
¿Debería dimitir Cayo Lara por afirmar que la prevaricación no es corrupción?
¿Deberían dimitir varios ministros, tales que Wert, Gallardón, Ana Mato, Fátima Báñez, por su no nula sino perjudicial aportación al bienestar de España?
¿Debería dimitir el señor Montoro por sus juegos dialécticos con datos oficiales secretos que él sibilinamente airea en defensa de su partido y por el contrario no airea los de su partido?
¿Debería dimitir el religioso Ministro del Interior?
¿Deberían dimitir todos los jefes de policía?
¿Debería dimitir quien no sea capaz de explicar la actuación de la señora Corina? ¿Debería dimitir la señora Corina de espía o de lo que sea?
¿Debería dimitir Artur Mas por entregarse, preso de ERC y como toda actividad y justificación políticas, al independentismo más exacerbado?
¿Debería dimitir algún juez, algún diputado, algún cargo autonómico como el Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, señor Lasquety?
¿Deberían dimitir los líderes sindicales y no presentarse a la reelección?
¿Deberían dimitir todos los banqueros y directores de Cajas, especialmente los que instaron un desahucio hipotecario o los que engañaron con participaciones preferentes?
¿Debería dimitir Mourinho?
¿Deberíamos dimitir todos nosotros por falta de vigor democrático?
La dimisión no redime, pero hace justicia. El dimitido, si lo hubiere, no debe ser un apestado.
Diferencia fundamentalísima (a propósito del Secretario de Organización del PSOE, Óscar López, con relación al caso Ponferrada): No es lo mismo ‘poner el cargo a disposición’ que ‘dimitir’ o ‘dimitir irrevocablemente’.
Las contestaciones se las dejo a ustedes, que pueden añadir todas las dimisiones que deseen. Sean benévolos.
Todos los que me vayan a decir ‘el que debería dimitir es usted’, por favor ahórrenselo. No pienso dimitir.

Arturo González