dilluns, 3 de febrer del 2014

EL PLA DE RAJOY

Tinc un pla per a Catalunya –va dir Rajoy durant la conferència que va fer el PP a Barcelona fa uns dies-. Però com sempre, no el va desvetlla, la qual cosa posava en dubte de que realment tingués un pla.
Però Doña Rogelia ens ho va desvetllar:  El govern podria suprimir l’autonomia catalana si des de Catalunya es segueix insistint en fer la consulta.
No puc imaginar-me que això pogués arribar a passar. Realment suposaria una mesura comparable a un cop d’estat. Molt constitucional. Tan constitucional com vulgueu, però molt poc democràtic. Les mesures de força no poden ser mai democràtiques per molt que comptin amb el suport de la llei.
Però tranquils. Aquí tots tranquils! Si finalment aquest pla no s’aplica, Rajoy encara té un pla B que, sembla, ja s’ha començat a aplicar: denunciar al President de la Generalitat per sediciós. Ja sé que no ha estat el PP qui l’ha denunciat, ni la FAES ni Vox, que ha estat el sindicat ultradretà Manos Limpias (no m’ha donat la gana traduir-ho)
Encara que sembla anar per lliure, Manos Limpias, per ideologia, està emparentada amb els elements de més extrema dreta de les formacions esmentades.
Sempre s’ha dit que a Espanya els partits d’extrema dreta han estat poc rellevant, perquè els hereus del franquisme ja estaven dintre del PP. Però en els darrers dies, sembla ser que sé li estan marxant figures que, en un altre temps han estat molt significatives, com Alejo Vidal-Quadras. Però tot indica que n’hi poden haver molts més, com Mayor Oreja per exemple, que encara que ha dit el contrari, aquest cap de setmana no té previst assistir a la convenció nacional del partit a Fatxadolid (la paraula està patentada per Antoni Fabregat de Vinaròs)
Pepa Bueno a la SER es preguntava l’altre dia quin PP sortirà de la convenció: si el que representa el PP Basc que vol tancar una vegada per totes el tema ETA o el PP de Mayor Oreja que sap que sense ETA, el seu partit perd molts d’arguments del que el van portar a governar Espanya.
Per cert, i parlant de perdre. Sembla ser que segons les consultes d’opinió que es fan sovint, ara mateix els populars perdrien pràcticament la meitat des vots que van obtenir el 2012. De més de 10 milions es quedarien en uns 5 milions. Un dels vots perduts és el meu...  
A veure quin nou  pla es traurà Rajoy del barret de copa per a tornar-me a engrescar...
(Ironia fina...)

PAISATGES DEL NOSTRE TERRITORI. NIU D'AMETRALLADORES A LA PARTIDA DE LA MARTINENCA D'ALCANAR PLATJA












Podemos: una propuesta imprescindible

Juan Torres López

La propuesta de un amplio grupo de personas encabezado por Pablo Iglesias bajo el lema Podemos me parece que supone un golpe de aire fresco y un revulsivo muy importante para promover la unidad ciudadana,  imprescindible para frenar los ataques a los derechos y los recortes sociales que estamos sufriendo.
Es lógico que pueda haber divergencias en algunos de sus planteamientos, o más o menos simpatías personales. Pero eso me parece que es lo de menos. A mí, por ejemplo, me hubiera gustado que viniese con pronunciamientos más concretos no solo sobre lo que hay que hacer en España sino, sobre todo, en Europa, pues al fin y al cabo, se presenta como una propuesta de cara a las elecciones europeas. Pero supongo que podrán ir haciéndose en el futuro inmediato y de manera común.
Comparto con sus promotores la idea de que estas elecciones son fundamentales. Nadie es tan simple como para pensar que solo con éxitos electorales se puede transformar la sociedad. Es preciso, además y sobre todo, que una gran mayoría social se empodere y ejerza su capacidad de decisión frente a los grupos que hoy deciden por todos. Pero es igualmente evidente, o al menos así me lo parece a mí, que si no se ocupan las instituciones con el apoyo de esa gran mayoría, tampoco puede lograrse ningún tipo de transformación. Por muchas que sean las huelgas y movilizaciones, si los de arriba siguen disponiendo del Boletín Oficial de Estado y tomando decisiones, seguiremos perdiendo derechos y bienestar porque nos gobernarán a su antojo.
Las elecciones europeas de mayo son muy importantes por ambas razones. Porque pueden servir para movilizar y avanzar hacia el el empoderamiento de la población y porque pueden permitir que se ocupen instituciones que ahora van a tener mucha más capacidad para frenar o impedir el daño que están produciendo las políticas dominantes.
Coincido también con la idea de que será muy difícil, por no decir imposible, que se consigan resultados electorales capaces de avanzar en esa dirección si no hay candidaturas unitarias y si éstas, en lugar de representar viejas formas de hacer política, no se identifican con la indignación y el rechazo de la mayoría de la sociedad hacia la forma en que hoy día se vienen gestionando los asuntos públicos. Un rechazo que es tan frontal que implica que ninguna fuerza política contaminada de lo viejo va a poder ser capaz de regenerar, como es necesario que ocurra, la vida social y económica.
Y sobre todo coincido en la convicción de que la única forma de promover candidaturas de esa nueva naturaleza y demostrar que efectivamente lo son es convocar elecciones primarias abiertas.
¿Cómo se puede decir a la ciudadanía que se ofrece un nuevo modo de representación y de hacer política si al final son los aparatos de siempre los que nos imponen la cara y el curriculum de nuestros representantes?
Es verdad que, antes que nada, hay que ponerse de acuerdo en qué medidas se defienden y en qué programa común se asume, pero basta con echar un simple vistazo a los documentos que se vienen elaborando, no solo desde la izquierda sino por cualquiera que de verdad quiera una auténtica democracia y bienestar social para España, para darse cuenta de que establecer los puntos de acuerdo no es un problema mayor.
Avanzar hacia ese programa de acción, algo que tampoco puede ser ajeno al debate abierto y participativo, es una tarea urgente pero igualmente lo es, y me atrevería a decir que incluso aún más, promover nuevos liderazgos y empoderar a personas que vengan a proporcionar aire nuevo a las instituciones y a la representación popular. Algo que se puede conseguir si se convocan las primarias que propone Podemos.
¿O es que de verdad hay otra alternativa para visualizar la amplia gestación ciudadana de cualquier candidatura y para que se revelen las preferencias ciudadanas sobre el nuevo tipo de personas que quiere como representantes?
En estos momentos hay varias opciones políticas que proponen el encuentro y la convergencia, la unidad frente a la agresión que sufrimos: una organización política muy importante, Izquierda Unida, y algunas otras que se van abriendo paso, además de plataformas diversas que proponen lo mismo. Todas ellas y sus dirigentes y responsables tienen ante sí una responsabilidad muy grande.
Es imprescindible que se convoquen cuanto antes y que acuerden la unidad de acción que pase por acuerdos programáticos fundamentales, la puesta en marcha de nuevas formas de organización desde la base y la convocatoria de elecciones primarias abiertas.
No se trata de sustituir la iniciativa de ninguna de ellas. Cada una puede y debe dar los pasos que mejor considere para proponer ideas, políticas y personas que puedan optar a ser candidatas. Se tratar de salir de su espacio para ir al universo de la ciudadanía que es mucho más amplio y que integra a todas las sensibilidades, ideologías y posiciones políticas, variadas pero con el común denominador de querer acabar con todo lo terrible que está pasando.
Los responsables de todas esas organizaciones y plataformas tienen ante sí un dilema fundamental: deberse a sus aparatos o a la ciudadanía. Habría que pedirle cuentas si no dan pasos visibles, concretos, efectivos y urgentes para poner en marcha esas candidaturas de nuevo tipo sin las cuales solo se conseguiría, si acaso, alguna que otra victoria precaria e incluso pírrica.
Agradezco a los promotores de Podemos y concretamente a Pablo Iglesias su propuesta y generoso ofrecimiento y los animo a no caer en la tentación de crear un espacio más, sino de exigir la convergencia de todos los existentes.
Como ellos dicen, ¡Podemos!

diumenge, 2 de febrer del 2014

UNS POCS PAGUEM PER A QUE EL PAÍS FUNCIONI

Amb quasi un 25% del PIB d’economia submergida, tot sembla indicar que en aquest país només uns pocs som els que aportem via impostos els diners necessaris per a que el país funcioni.
Els primers interessats en que això continuï igual és el govern al no posar els mitjans suficients a les mans de l’Agència Tributària per a que es puguin destapar les bosses de frau existents.
Els segons interessats són els que cobrant una petita prestació, treballen a l’economia submergida per a treure un sou complementari (que, sovint sol ser el principal)
Quan en un país estan tots contents de com funciona el sistema, no hi conflictes. El govern té entretinguts els ciutadans explicant-los les grans xifres de la macroeconomia i assegurant-los de que el país ha sortit de la rescissió i el creixement econòmic torna a reflectir dades positives. Només unes dècimes, però positives que és el que compta. Els aturats perquè gra`cies als ajuts que reben (no només la prestació pel subsidi, sinó també ajuts de menjador, llibres i fins i tot beques universitàries), encara els hi queden diners per a poder fer algun extra.
Els que hem tingut i tenim fills universitaris i no em rebut cap ajut i, per tant, sabem el cost econòmic que comporta tenir fills estudiant fora de casa, ens mirem atònits de com hi ha famílies que amb pocs recursos econòmics (de tenir-ne ja no els hi donarien beca) poden mantenir els seus fills estudiant per aquells móns de déu...
Però no només paguem l’educació de molts, sinó també la sanitat, la justícia, el transport i tota la resta de camps que són deficitaris i on l’Estat ha d’eixugar les multimilionàries pèrdues que comporta.
Ara mateix, amb 56 anys, en fa 37 que cotitzo. Primer a la Seguretat Social i ara a MUFACE (la mútua de funcionaris se l’Estat) Quanta gent hi ha que han cotitzat els 15 anys mínims per a tenir dret a la pensió?
De vegades les diferències no són tant de classe, ja que, aparentment, entre els uns i els altres, l’única diferència existent es troba en el resultat de la declaració de la renda.