dimarts, 24 de novembre del 2015

LES OLIVERES MIL·LENÀRIES DE LA SÉNIA (1)













VILAFRANCA DE CONFLENT (11)













Cataluña y Kosovo, nada que ver

Los paralelismos entre la antigua provincia serbia y España son imposibles



Kosovo, una antigua provincia serbia de mayoría albanesa, declaró su independencia en 2008 con el apoyo de una parte de la comunidad internacional encabezada por Estados Unidos. Siete años después, se parece bastante a un Estado fallido: constantes protestas ciudadanas por el paro, ausencia de futuro para sus jóvenes y una migración masiva hacia Occidente. Aunque haya sido reconocido por más de 100 países, sigue sin ser aceptado por Estados como China, Rusia o España. El Tribunal Internacional de Justicia de la ONU, con sede en La Haya, confirmó que la declaración unilateral de independencia no fue ilegal en una sentencia no vinculante de 2010.
Hoy Kosovo ha intentado, sin éxito, entrar en la Unesco porque en este organismo de Naciones Unidas no existe el derecho de veto, a diferencia del ingreso en la ONU, que tiene que pasar por el Consejo de Seguridad, donde cinco potencias pueden vetarlo. Un informe encargado por la Generalitat propone que Cataluña siga un camino similar para colarse por la puerta trasera en el sistema de Naciones Unidas. Los paralelismos entre Kosovo y Cataluña se acaban ahí, tanto desde el punto de vista de la historia, de la división étnica, del pasado reciente como del derecho internacional. Son casos que no tienen absolutamente nada que ver.
Conforme se hacían más intensas las fuerzas centrífugas en Yugoslavia, Milosevic quiso aumentar su control sobre todas las repúblicas y también sobre sus provincias y decidió suspender en 1990 la autonomía de Kosovo y Vojvodina, una decisión que muchos historiadores ven en el origen de las guerras yugoslavas. Derrotado en Eslovenia, que logró la independencia tras un breve conflicto de diez días, y en Croacia, Milosevic ganó territorio con una limpieza étnica genocida en Bosnia y decidió hacer lo mismo en Kosovo. Cuando desató una oleada de represión brutal contra los albaneses, la OTAN lanzó una campaña de bombardeos en 1999, que provocaron dos meses después la salida de las tropas serbias de la provincia que, tras una resolución del Consejo de Seguridad, quedó en manos de unas misión de Naciones Unidas, UNMIK, con el apoyo de tropas internacionales coordinadas por la OTAN, KFOR.Kosovo es el lugar donde empezaron y acabaron las guerras que asolaron los Balcanes en los años noventa. Yugoslavia era un país formado por seis repúblicas, que en teoría tenían derecho a la autodeterminación, y dos provincias autónomas que formaban parte de Serbia: Kosovo, con un 90% de población albanesa pero que, a su vez, los serbios consideran la cuna de su historia y religión, y Vojvodina, con una minoría húngara. Cuando tras la muerte del mariscal Tito Yugoslavia se tambaleaba, Slobodan Milosevic, el fallecido caudillo serbio, utilizó Kosovo para azuzar el nacionalismo y convocó, en 1989, un aquelarre que reunió a cientos de miles de personas en el Campo de los Mirlos, en las afueras de Prístina. El lugar no podía ser más simbólico: allí, en 1389, los serbios perdieron su independencia tras ser derrotados por los turcos y desde entonces ese día, el 15 de junio, es su fiesta nacional.
Las venganzas de los albaneses contra los serbios, el poder que alcanzaron los antiguos guerrilleros, la división étnica, el temor generalizado en el que vivían los serbios, los ataques contra sus iglesias (reconocidas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad), las mafias que campaban a sus anchas en un territorio que se convirtió en un foco de todo tipo de tráficos, la pobreza y el paro transformaron a Kosovo en un polvorín. La situación estalló en marzo 2004 con una revuelta contra la minoría de serbia de Kosovo, durante la que una turba de unos 50.000 albaneses radicales (según una investigación de la ONU) asesinó en dos días a 19 serbios e incendió 4.000 edificios, entre ellos 39 iglesias, ante la impotencia de 15.000 soldados de la Kfor (subió después de los ataques hasta los 19.000) y 3.000 policías de Naciones Unidas.
La ONU encargó entonces al diplomático finlandés Martti Ahtisaari buscar una salida, antes el riesgo de que la violencia étnica volviese a los Balcanes. Llegó a Prístina un día de noviembre de 2005 con temperaturas bajo cero y sin calefacción. Como en muchos países del Este, era central para toda la ciudad y no funcionaba, toda una metáfora del Estado general de la provincia. Los líderes kosovares anunciaron que no iban a aceptar otra salida que no fuese la independencia y los serbios que no iban a aceptar la independencia de ninguna manera. ¿Se parece esto en algo a Cataluña? Según fueron pasando los meses, muchos representantes de Belgrado, incluso dentro de los partidos nacionalistas, decían, en voz baja, que estarían encantados de que Kosovo se fuese de una vez siempre y cuando se hiciese sin grandes alharacas, una independencia de facto pero no de derecho.
Ahtisaari rompió el nudo gordiano apoyando una extraña fórmula de independencia tutelada y presentó su plan en febrero de 2007, que orillaba el gran problema jurídico: Milosevic aceptó la retirada de sus tropas y la entrada de las fuerzas internacionales con la condición de que Kosovo nunca fuese independiente, como quedó plasmado en la resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU que autorizaba esta operación y garantizaba la integridad territorial de Serbia. El plan fue rechazado por Belgrado, lo que no impidió que Kosovo declarase su independencia en 2008, con el apoyo de gran parte de la comunidad internacional.
El plan establecía que "Kosovo será una sociedad multiétnica, que se gobernará a sí misma de forma democrática y con respeto a la ley, a los derechos fundamentales y a los derechos humanos". El documento decretaba desde su preámbulo que "una autoridad internacional civil" supervisará a las autoridades nacionales.
Kosovo ha logrado el reconocimiento de más de 100 países aunque otros, como España, Rusia, China, India o Rumania, se niegan porque consideran que no se puede aceptar una independencia que no reconoce el Estado del que se ha desgajado el nuevo país. Está fuera de la ONU y la entrada en la UE parece una quimera, no sólo por motivos políticos sino porque los criterios mínimos para comenzar una negociación están muy lejos. La sentencia del tribunal de La Haya representó un gran espaldarazo pero no es vinculante y, en cualquier caso, dejaba claro varias veces que Kosovo es un caso único y excepcional. Kosovo se independizó de forma unilateral sin contar con el acuerdo del país al que había pertenecido hasta entonces, pero lo hizo aplicando un plan de Naciones Unidas elaborado durante dos años, con el apoyo de la mayoría de los países de la ONU y bajo el compromiso de someterse a la supervisión internacional. Los paralelismos con Cataluña son imposibles de encontrar.

dilluns, 23 de novembre del 2015

UNA DERROTA PER A LA HISTÒRIA (MADRID, 0; BARÇA, 4)

Tal com deia dissabte a Facebook me’n alegro amb les derrotes del Madrid que amb les victòries del Barça. Però imagineu-vos si es produeixen totes dues coses i, per acabar-ho d’arrodonir, seguiu imaginant si el partit els disputen tots dos equips i guanya el Barça... I encara més: si ho fa per golejada! Suposo que no t’ha calgut fer un gran exercici d’imaginació ja que això mateix va passar el mateix dissabte.
No obstant us he de dir (i reafirmar) que els partits ja no els vics tan intensament com fa uns anys. Abans els podies veure per la tele en obert... Després dels dos enfrontaments a la lliga, un el donaven en obert i l’altre en tancat... Ara els has de pagar tots. I a sobre no et deixen gaudir ni dels resums, ja que TVE en té els drets i cedeix unes poques imatges a les altres televisions per a cobrir, exclusivament, els informatius. O sigui, no veus pràcticament res... Em sembla vergonyós.
Però anem al partit. La primera informació que vaig tenir va ser pel mòbil. Vaig veure que s’estava a punt d’acabar la primera part i el Barça guanyava per un esperançador 0-2. Després vaig recórrer a Internet i allí vaig poder veure que, a part del resultat, el Barça li estava donant al Madrid tota una lliçó de joc. La segona part la vaig seguir una mica més, però tampoc tant...
Això sí, al final del partit vaig seguir la roda de premsa de Luis Enrique i els comentaris que sobre el partit oferien Esport 3 i el 3/24. El 0-4, a part de contundent va ser històric i només comparable amb el 0-5 del primer anys de Cruyff com a jugador i el 2-6 del primer any de Pep Guardiola com entrenador del Barça. Luis Enrique ja pot presumir!
Us podeu imaginar a l’entrenador del Barça. Estava exultant, per molt que ho volgués dissimular. Va dir que Iniesta era patrimoni de la humanitat i quan sé li va preguntar pel retorn de Messi i que si això li suposava un problema, va respondre: Beneït problema, tots els problemes haurien de ser com aquest!  
Abans del partit s’havia estat parlant de l’estat de forma dels dos equips. Tot indicava que el Barça arribava amb millor forma. Tot i això, Benítez, l’entrenador blanc havia pogut disposar de quasi tots els jugadors al ser deslliurats, en una majoria per les seves respectives seleccions, mentre que el Barça tenia escampats a bona part de la seva plantilla per mig món. I Messi lesionat...
Però a l’hora de la veritat, sobre el camp, la impressió va ser molt diferent. Per els informacions que em van arribar, el Barça tenia molt clar a què jugava, mentre que el Madrid, com es diu vulgarment, perseguia ombres.
Quan això passa, és evident que l’equip que perd surt tocat. Així, no és estrany que els socis i aficionats del Madrid reneguessin dels jugadors, de l’entrenador i fins i tot del president.
Les estrelles blanques (Benzema, Bale i Cristiano, coneguts com la BBC), sembla ser que tenien el cap a un altre lloc per diferents motius. Mentre el primer sap que pot entrar a la presó, els altres dos, sembla ser, tenen més d’un peu fora de l’equip. Fins i tot s’especula de que Cristiano pot anar-se’n al mercat d’hivern (o sigui, en un màxim d’un parell de mesos) Fixeu-vos en la dada. Dels 8 gols que porta Cristiano aquesta temporada, 5 els va fer contra l’Espanyol.
Qui tampoc sembla tenir clar el seu futur més immediat és Rafa Benítez. Si ja estava qüestionat abans del partit, imagineu-vos després. En roda de premsa sé li va preguntar si algú li havia impost l’alineació. Va respondre que com sempre ha fet, intenta gestionar el millor possible el grup.  Per tant, una resposta més políticament correcta que no clarificadora. El Periódico per exemple parlava d’alineació política, es a dir, que havien de prevaldre els noms abans que l’estat de forma dels jugadors... I així els hi va anar.
Però dissabte, ni el Déu de la llotja blanca es va salvar de la gran protesta merengue. També n’hi va haver per al gran Florentino Pérez, el tot poderós president del Madrid. Florentino porta el mateix camí que la primera vegada que va ocupar la presidència i que va sortir per la porta del darrere. De un equip com el Madrid, sempre s’espera més que els títols que s’han guanyat en les dues etapes de Florentino.
Però el pitjor de tot és que quan el Madrid no ha guanyat ho ha fet el Barça i això cou, com ens cou a nosaltres quan passa a l’inrevés. Però darrerament, per sort, els hi cou més als blancs que als blaugranes.
Si tenim en compte tots aquests precedents, cal pensar que ens esperen uns dies plens d’emocions. Crisis com aquestes no s’acaben en un obrir i tancar d’ulls i, per tant, es previsible que el Madrid encara no hagi baixat a l’infern.
Crec que m’ho passaré bé!