divendres, 22 de juliol del 2011

LA UVA MADURA


La hambruna se había apoderado de la tropa. Los camiones de suministros llegaban con irregularidad o no llegaban ya que la mayoría de los días eran abatidos por la aviación alemana al servicio de Franco.
Mientras, ante nuestros ojos, las viñas nos mostraban una uva cada día más madura y más sabrosa. El único obstáculo para alcanzarla eran las balas de los nacionales que ocupaban las inmediaciones de Vilalba del Arcs. Aquel día bajaríamos al caer la noche. Avisamos al cuerpo de guardia de nuestras intenciones, pero deberíamos ir desarmados y desprovistos de cualquier peso superfluo. Cuanta más uva pudiésemos coger, mucho mejor.
Ya habíamos cargado una buena cantidad cuando de repente vimos unas sombras con las que no contábamos: el enemigo había tenido la misma idea que nosotros…