Solo los más cercanos al presidente o los que algún día tuvimos ocasión de conocer sus opiniones sobre el FC Barcelona sabemos el grado de forofismo que practica Florentino Pérez. Al presidente del Real Madrid le gustaría en ocasiones abandonar el palco y ver los partidos junto a sus protegidos de la Grada Joven, en el tercer anfiteatro del fondo norte del Bernabéu. El mismo lugar que ocupa el reconvertido líder de los Ultrasur, Ochaita, el abogado de Mourinho y otra gente carente de respeto. Todos recordamos su salto de alivio entre asientos, en el Estadio da Luz de Lisboa, para cruzar su mano con la de Aznar y celebrar el gol de Sergio Ramos en los minutos de descuento. Ese es el Florentino real y no el personaje que presenta a los entrenadores con ese rictus de enterrador.
Ya le costó un disgusto con la justicia y tuvo que declarar ante el juez de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, cuando quiso introducirse en el mundo de Internet y las redes sociales. Pérez estaba obsesionado en adquirir más seguidores en Facebook y superar al Barça. También pretendía mejorar su reputación en la red y la de algunos jugadores protegidos utilizando los servicios de una empresa que estaba en el entramado de la operación Púnica, otro de los casos de corrupción en la Comunidad de Madrid. Según informaron varios medios Florentino Pérez contrató en octubre de 2013 a Alejandro de Pedro por 25.000 euros mensuales, hasta un máximo de 300.000 euros al año, por llevar el posicionamiento en redes del Real Madrid. El presidente del Real Madrid admitió ante el juez que no consultó con el resto de la Junta Directiva del club este asunto porque para él se trataba de “un tema menor”.
Muchos han sido los líos en los que se han metido los community manager de empresas importantes en Twitter. La última fue Ballantine´s España que tuvo que prescindir de un conocido del mundo tuitero como Manolo CM, después de escribir un tuit muy merengue: “Contando las horas para el partido de mañana en Turín. #HalaMadrid!!”. El mensaje se convirtió en viral y por supuesto en trending topic con la etiqueta #BoicotABallantines. Una bebida rival, Ron Barceló, su sumó a la crítica con un mensaje dirigido a los aficionados del Atlético: “Colchoneros, nosotros no hacemos distinciones a la hora de brindar ;) #BoicotABallantines”.
Unos se pasan y otros no llegan. El actual community manager del Real Madrid recibió en la noche del sábado la orden tajante de no poner ningún tuit en la cuenta oficial felicitando al FC Barcelona, por ganar su quinta Liga de Campeones. Un feo detalle por parte del presidente (en la casa blanca todo lo decide el “ser superior”) que profesa un odio enfermizo al Barça y le hace perder ese señorío con el que se le llena la boca cada vez que habla de los valores que se manejan en su cortijo. El hecho no tendría mayor importancia, porque cada uno felicita a quién le da la gana, pero existe un precedente que deja en evidencia a Florentino y sus consejeros bufones. Hace un año, el 24 de mayo de 2014, a las 23 horas y 43 minutos la cuenta oficial del FC Barcelona público un tuit felicitando al Real Madrid por su victoria en la Champions y dando la enhorabuena al Atlético por su extraordinaria campaña. Un gesto de señorío.
La noche del sábado desde el presidente del gobierno, Mariano Rajoy, pasando por la Liga, la RFEF, muchos clubes españoles y extranjeros más muchos jugadores de todos los equipos europeos felicitaron al FC Barcelona por su éxito en Berlín. Florentino se desmadró en Lisboa y no supo ser caballero en la victoria de su eterno rival. Al menos la cuenta del equipo blanco no puso un tuit con la etiqueta #ForzaJuve.
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